Primera parada: Santander/Cantabria

He tardado un poco más de lo previsto en ponerme en marcha con el blog. Pero es que desde el 13 de octubre que hice la presentación oficial han pasado unas cuantas cosillas. La más importante de todas: ¡he empezado a trabajar! Son 6 meses nada más, pero menos es nada y además vuelvo a lo que más me gusta: el turismo. Esta vez no como otras de cara al público si no más en temas de gestión, pero igualmente interesantes. Me encanta el proyecto y aunque con fecha de caducidad, quien sabe lo que puede pasar por el camino. ¡Yo voy a por todas, que no se diga! Dicho esto, entremos en materia…

Siempre hay un punto de partida, un comienzo. El mío es Cantabria, donde vivo, y más concretamente Santander. Estoy completamente enamorada de mi ciudad y mi región, no vamos a negar ahora la evidencia, además de que a poco que sigáis mi Instagram o el resto de mis redes sociales las pruebas son irrefutables.

Cuando hablamos de viajar o de salir de viaje, parece que nos tenemos que ir a la otra punta del mundo para tener realmente la sensación de habernos movido, y se nos olvida que a veces con recorrer solo 50 kilometros por ejemplo, encontramos verdaderas joyas a un paso de casa. Por eso quiero que Cantabria sea una constante en el blog, porque me parece que a tiro de piedra tenemos sitios increíbles que descubrir y conocer y yo intentaré descubriros los que tengo alrededor. ¿Os he dicho ya que me encanta el sitio en el que tengo la suerte de vivir?

Desde los Collados del Asón hasta Picos de Europa pasando por el valle del Besaya o los pueblos y villas marineras, las posibilidades son enormes. A eso le sumamos que soy un poco culo de mal asiento y no me gusta estar mucho tiempo quieta en casa y ya tenemos la unión perfecta. Excursiones de montaña, días de «villaging» como dice mi amiga Bea, días culturales visitando algún museo o exposición interesante o simplemente una escapada con buenos amigos a comer o cenar por aquí. Muchas posibilidades que permiten otros tantos planes y que os iré contando en el blog. Y Santander, mi Santander, este lujo de ciudad que tenemos y a la que no siempre prestamos la atención que merece.

Y así, para romper un poco el hielo, porque al final esto es un blog y los blogs son para compartir, os lanzo una pregunta tanto para los que sois de aquí como para los que conocéis la ciudad (los que no habéis venido aún no sé a qué esperáis para visitarnos):

¿Cuál es vuestro rincón preferido de la ciudad? ¿Y del resto de la tierruca? Empiezo yo, para que no se diga:

De Santander mi rincón preferido sin duda alguna es la punta del faro de Cabo Mayor, sentarme al borde del acantilado a escuchar el sonido del mar y no pensar en nada más. Allí se le olvidan a uno todos los males. Me puedo quedar horas allí sentada que se me pasan como minutos.

Faro de Cabo Mayor

De Cantabria es más complicado, no puedo quedarme solo con uno así que hago un poco de trampa y digo dos: La playa y el mirador de Los Tranquilos, en Loredo y el Mirador de Santa Catalina, perdido entre las montañas de Liébana.

LoredoMirador de Santa Catalina

Os toca… 😉